El mal se apodero del asilo, desde el día en que abrió sus puertas en 1865. Cuando finalmente se cerró en 1977 había vencido el mal. Los pacientes no fueron los únicos que estaban locos, una vez que alguien entró por la puerta nunca sería lo mismo. Ahora te toca a ti entrar y liberar al asilo de las fuerzas del mal que se esconden en su interior. ¡Buena suerte!